Cosas que hacen los gatos cuando van a morir
Es muy duro perder a un amigo que te ha acompañado durante toda su vida. En el caso de los gatos, nosotros como sus cuidadores y protectores deseamos que nada les pase y puedan acompañarnos durante toda nuestra vida. Lamentablemente es muy probable que tengamos que pasar por el fallecimiento de nuestro gato, ya que su vida es mucho más corta que la nuestra.
Al igual que las personas, cada gato lidia con esta parte de la vida de una forma diferente. Pero también, al igual que nosotros, por su naturaleza pueden llegar a mostrar ciertos comportamientos que son característicos de los gatos próximos a fallecer. Veamos que hacen los gatos cuando van a morir.
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Índice
Cambio de comportamiento
Cada gato es individuo único con su propia personalidad, carácter y experiencias. Por ello podremos observar cambios de comportamiento diferentes en cada gato. Nadie conoce mejor que tú a tu propio gato. Por eso tu eres la persona mejor capacitada para detectar cualquier cambio en su comportamiento o rutina habitual.
Estate atento y toma cualquier cambio como signo de que algo va mal. Algunos ejemplos son: rechazar caricias, agresividad sin motivo aparente, decaimiento, pasividad, entre otros.
Búsqueda de calor
Cuando la muerte está realmente próxima el organismo comienza a reducir drásticamente su metabolismo, reduciendo la actividad de órganos, la producción de energía y por tanto la producción de calor.
También es posible que tu gato esté pasado por una enfermedad grave que lo incapacite y por tanto su cuerpo está reservando toda la energía en esta lucha. Disminuyendo la producción de calor.
En ambos casos el comportamiento que tú observarás es que tu gato buscará el calor con más frecuencia y pasará en los sitios calentitos mucho más tiempo.
Dormir más
Por la misma razón que el apartado anterior, si su cuerpo no tiene la energía para producir calor, mucho menos la tendrá para andar caminando o explorando. Lo normal es que tu gato pase sus últimos días acostado, descansando lo máximo posible.
También es posible que sea debido al malestar o dolor que esté experimentando. El veterinario nos puede recomendar cuidados paliativos en caso de que sean necesarios para evitar el sufrimiento durante este momento. Este es otro de los síntomas que muestran los gatos cuando van a morir.
No quiere comer o beber
Uno de los primeros signos que podemos observar es la pérdida de apetito y de la sed. Que un gato enfermo o muy mayor deje de comer y beber es una mala señal; y nos puede indicar que el momento está cerca.
Si el veterinario determina que es adecuado, se le nutrirá e hidratará vía intravenosa. En otras ocasiones es simplemente la demostración de que el organismo ya no puede realizar funciones tan cotidianas como la digestión, un claro síntoma de que el gato va a morir.
No quiere jugar
Si nuestro gato, aún que sea muy mayor, nunca nos rechaza un momento de diversión y juego suave. Pero de repente comienza a no querer jugar nunca, mostrarse apático o incluso de mal humor, es un signo temprano de que se siente muy mal y puede fallecer pronto.
Alteraciones en el acicalamiento
Las anormalidades en el ritual de acicalado también son una primera señal que los gatos nos dan. El acicalado es una función básica de los gatos no sólo para limpiarse si no también como una forma de socializar.
Si ves que tu gato no se acicala como siempre, se deja acicalar por otros gatos pero él no corresponde, o tiene nudos y suciedad, ves que lo intenta y desiste al no verse capaz, son todo signos de un deterioro grave y de que morirá pronto.
Se esconde
Puede que este sea el signo más común que los gatos hacen cuando van a morir. Y también de los que pueden hacer sentir peor a las personas ya que podemos tomárnoslo como algo personal, sentir que nuestro gato no confiaba en nosotros lo suficiente.
Porque para los humanos, que alguien prefiera morir solo a acompañado por su familia puede decir muchas cosas sobre la situación. No olvides que nosotros somos animales sociales, mientras que los gatos no. Por tanto no podría estar más alejado de la realidad.
La realidad es que, por instinto, los gatos al sentirse muy enfermos o débiles buscarán el refugio más aislado del mundo posible.
Ya que al estar tan débiles no podrían defenderse o huir de un ataque y serían víctimas fáciles para un depredador. La mentalidad del gato es individualista, no esperan que nadie les ayude porque en la naturaleza nadie lo haría, por ello no debemos tomarlo como algo personal.
Se vuele más cariñoso
En el otro extremo están los gatos que prefieren la compañía y el afecto en los momentos difíciles. Esta situación es menos común, pero como cada gato es diferente, puede ser que tu gato actúe de esta forma. Si tu gato es más bien de los que no les gustan los mimos y de repente se deja hacer de todo, es un cambio de comportamiento que también nos debe alertar.