El Gato Elfo

¿Qué te parecería si te dijera que existe un felino con apariencia de duende? Aunque el gato elfo también llamado gato duende, aún no está reconocido como raza por la Federación Mundial (WCF) ni por la Asociación Internacional (TICA), es una variante del Shpynx solo apta para los más osados.

Carece de pelo y tanto sus facciones como sus grandes orejas, caídas y puntiagudas, lo convierten en un felino muy especial. Algunos lo comparan con la raza de perro Pincher. Otros, con los murciélagos o con el personaje mitológico del duende. Al margen de su aspecto, no deja indiferente a nadie, sobre todo, si has tenido la fortuna de convivir con él.

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¿Cómo es un gato Elfo?

Como ya sabes, los elfo son gatos muy parecidos a los Shpynx en cuanto a corpulencia. La diferencia más acusada reside en que su cara es más alargada y delgada. Destacan sus pómulos prominentes y los pliegues en orejas, hocico y hombros. Sus orejas, grandes y puntiagudas, se rizan hacia atrás.

Los gatos Elfos tienen un cuerpo musculoso, patas largas y finas y con una cola larga, que tiende a estrecharse hacia la punta. Sus ojos resultan enigmáticos, grandes y rasgados. Pueden ser de cualquier tonalidad, en cuanto al color de la piel se refiere. Como curiosidad, sus bigotes pueden ser cortos y rizados o estar ausentes.

Carácter del gato Elfo

Al contrario de lo que puede hacerte creer su aspecto, el gato Elfo es un felino muy amistoso. Son cariñosos, vitales, sociables e inteligentes, disfrutan sobremanera de la compañía de los humanos. A diferencia de la mayoría de razas felinas, estos gatos gozan de un alto nivel de adaptabilidad y solo se estresan si permanecen solos durante muchas horas. No toleran la soledad.

Si vas a estar muchas horas fuera de casa, deberías plantearte hacerte con un compañero para él. El gato Elfo se llevan bien con los niños, con los perros y con otros gatos. Lo esencial para esta raza es la interacción, el juego y recibir cariño. No dudará en movilizar todos sus recursos para llamar tu atención.

Los gatos Elfos son felinos activos que demandan un hogar con un alto enriquecimiento ambiental, así como con limpieza y suficientes recursos para escalar y trepar. Por tanto, los juguetes interactivos o de inteligencia y los árboles para gatos de varias alturas, así como tu compañía y la de otras mascotas, son indispensables para su bienestar y equilibrio emocional.

¿Qué cuidados necesita un gato Elfo?

La falta de manto condiciona su calidad de vida. No se trata de gatos débiles o enfermizos, pero sí que, como tutor, deberías adoptar ciertas precauciones para prevenir las quemaduras o el contagio de enfermedades. No lo expongas al sol en las horas centrales del día y aplícale un protector solar para no irritar su delicada dermis en verano.

En invierno la casa deberá mantener una temperatura templada, ya que los gatos Elfos son muy sensibles a las corrientes y a los cambios térmicos bruscos. Si va a salir al exterior, abrígalo y cuando duerma cúbrelo con una manta. Igualmente, deberás habituarlo al baño cada mes. De este modo, eliminarás la suciedad y el exceso de sebo que segrega su piel.

Utiliza agua templada y un jabón específico para gatos con piel sensible. Asegúrate de secarlo bien para que no se resfríe. Si prefieres no bañarlo, opta por las toallitas húmedas o pásale un paño húmedo por el cuerpo con suavidad. Por su particular forma, sus orejas acumulan con facilidad cera entre sus pliegues y reclaman ser higienizadas cada semana.

Basta con que le pases un bastoncillo empapado en suero fisiológico o en clorhexidina por las orejas, cerciorándote de dejarlas secas al terminar. Hazlo una vez por semana para contribuir a la prevención de las otitis.

Los gatos elfo presentan unos requerimientos nutricionales superiores al del resto de razas, precisamente por la falta de pelo.

Consulta con tu veterinario el tipo de alimento, completo y equilibrado, más acorde a dichas necesidades y completa sus cuidados con la limpieza semanal de dientes y ojos, así como con la actualización de las vacunas y desparasitaciones, internas y externos, que les son comunes a todos los felinos.

¿El gato Elfo tiene buena salud?

No se les conocen enfermedades genéticas o hereditarias. De hecho, son gatos que, por lo general, gozan de una excelente salud. Las patologías más comunes en ellos son las relacionadas con el oído (otitis o inflamación del canal auditivo) y con la piel (dermatitis o, en los casos más graves, carcinoma de células escamosas).

Igualmente, los gatos Elfos son más vulnerables que otras razas a contraer enfermedades infecciosas por la proliferación de bacterias. De ahí que la limpieza de su hábitat deba ser óptima. Fuera de esto, con los cuidados descritos, y tu cariño, disfrutarás de la compañía de tu gato duende por muchos años. ¡Garantizado!

Historia y origen del gato Elfo

Las criadoras estadounidenses Kristen Leedom y Karen Nelson son las responsables de la existencia de estos entrañables gatitos. Karen es alérgica al pelo de gato, razón por la que decidió crear una nueva raza que fuera hipoalergénica. Así, cruzaron un Shpynx con una American Curl y el resultado evidenció lo mejor de ambas razas.

Carecen de pelo o el que tienen se reduce a una finísima capa de vello, casi imperceptible a la vista y al tacto, que se concentra en el hocico, en las patas y en la cola. Sus orejas, caídas y rizadas, recuerdan al Curl Americano y evocan a los duendes. Al tratarse de una variante tan reciente es bastante desconocida y existen pocos ejemplares en el mundo.